Arroyo Vega

Por Buenos Aires pasan 11 arroyos de los cuales el Arroyo Vega es el único que nace dentro del territorio de la ciudad.
Todavía en el siglo XIX la parte alta de los arroyos era campo y a medida que se acercaba el siglo XX las partes bajas eran insalubres y miserables.
En aquella época la forma de resolver parte de los problemas de insalubridad era encauzarlos y taparlos, con su consecuencia lógica: un arroyo de llanura que desborda ocupa buena parte de la cuenca, que tenía barrios construidos.
Esto se subsanó parcialmente con inmensas obras de tecnología (aliviadores, bombas y segundos emisarios) tal vez como "mal menor” frente a pronósticos de lluvias más copiosas en menor tiempo para los años que vienen.
Alguien en el gobierno de Buenos Aires tuvo la ocurrencia de hacernos conscientes de lo que hay en ese suelo que pisamos y pusieron carteles y pintadas para que sepamos por donde están pasando los arroyos de la ciudad.
Como los arroyos están vivos, no se trata de hablar del pasado sino de tener más claro el presente y de pensar que hay alternativas futuras (como en Corea) para desentubarlos.
Ojalá podamos hacer algo parecido con tantas otras cosas que son parte de la ciudad en cada uno de sus rincones.