Situado a 1,5 km del pueblo hay una peña por donde se vierte el agua de dos arroyos formando una fabulosa cascada de unos 30 metros coronada por un molino harinero del S XVI.
Desde aquí, podrás observar el Castillo de Hierro desde uno de sus perfiles más interesantes, además de unas preciosas vistas de la Sierra Norte de Cádiz.