En esta avenida disfrutaremos de dos paradas muy singulares, la Lonja de la Seda y el Mercado Central. En primer lugar, a mano izquierda se levanta la Lonja de la Seda, también llamada Lonja de los Mercaderes, situada frente a la Iglesia de los Santos Juanes. Se caracteriza principalmente por ser el edificio gótico civil más destacado de Valencia, ya que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Su construcción representó la prosperidad comercial conseguida por Valencia en el siglo XV, un símbolo del poder de la ciudad para atraer a los comerciantes, en un momento en que ya se vislumbraban tiempos difíciles para la economía local derivados del descubrimiento de América y el consiguiente desplazamiento del comercio del Mediterráneo hacia el Atlántico. La Lonja consta de cuatro partes visitables para el turista: el Salón de Contratación o Columnario, donde se observa una imponente sala con 24 columnas helicoidales que terminan en una bóveda de crucería; el Pabellón del Consulado o Consulado del Mar, nombrado así por albergar la institución del mismo nombre que se encargaba del cumplimiento de las cuestiones marítimas y mercantiles, y en el que es posible visitar el Tribunal del Comercio y la Cámara del Consulado, estancias que destacan ambas por el trabajo artesanal de sus techos de madera y los azulejos de sus suelos; y finalmente el Patio de los Naranjos, que da paso a tres salas y permite observar el torreón, antigua cárcel para los comerciantes con deudas pendientes. Avanzando por la Plaza del Mercado seguidamente encontramos a mano derecha el Mercado Central, uno de los mercados más grandes de Europa con sus 8.000 metros cuadrados y más de 1.200 puestos en su interior, en los que poder degustar los productos frescos que brinda tanto la huerta valenciana como el mar Mediterráneo. El edificio que lo alberga lo reconoceremos fácilmente por su decoración a base de vidrieras de colores y azulejos y por su cúpula de más de treinta metros de altura, que lo convierten en una joya de la arquitectura modernista.
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