Si levantamos la vista hacia los aleros éstos están torneados con molduras de piedra con cincho del mismo material.
Al igual que otras casonas sus muros son de mampostería de piedra caliza y las esquinas, de piedra sillar tallada.
Lo más interesante y es que cuenta la leyenda que del interior de la casa sale un pasadizo que comunica con el palacio de Cogolludo.