Es del final del siglo XV, inicio del siglo XVI. Con una robusta base, fuste de recorte hexagonal y un remate con nombre de “jaula”, poco común y muy ornamentada, característico del estilo gótico final. Estuvo guardado en la época de la República por ser símbolo del poder municipal. Era utilizado para exponer los criminales ante al juicio de la populación en plaza pública.